Alteraciones de las uñas

No se les suele dar importancia a las uñas, a excepción de lo decorativo. Estas pueden sufrir alteraciones dolorosas; e incluso, reflejar daños en nuestro organismo.

La uña tiene la misión de proteger los extremos de los dedos de posibles roces y agresiones. En los pies, la uña tiene una gran importancia ya que si están dañadas, pueden interferir en la manera de caminar y, por tanto, alterar la forma de los pies y huesos de las piernas.

Crecen a un ritmo de 0.1 mm. por día, aunque este desarrollo está sujeto a cambios; los traumatismos, como morderse las uñas (onicofagia), aumentan la velocidad de crecimiento. Cada seis meses, las uñas de las manos se renuevan completamente; las de los pies, tardan 12 meses.

Existe la creencia de que las manchas blancas que aparecen es por falta de calcio; pero la uña está formada por queratina, es la misma sustancia que la del cabello o los callos de los pies. Estas pequeñas manchas, son burbujas de aire microscópicas que se producen por continuos traumatismos en el lecho ungueal.

La uña es muy porosa, esta cualidad la hace más o menos dura. Una uña dura y sana contiene entre un 8 y 17% de agua. Si la cantidad es menor, la uña se rompe con facilidad; si es mayor, la uña se vuelve opaca y blanda.

Trastornos.

- Uñas quebradizas: aparece cuando hay una carencia de vitaminas, cuando hay anemia, o por alteraciones renales.

- Uñas con hongos: los hongos o dermófitos atacan a las uñas produciendo cambios en su color, olor y grosor. Se encuentran en zonas húmedas, como piscinas o vestuarios.

- Onicolosis: la uña se despega del lecho ungueal. Esta alteración se produce por hongos, psoriasis, trastornos circulatorios u hormonales.